La relación que experimentamos con nuestros amigos animales es tan estrecha que cualquier cambio puede generar un gran conflicto; sobre todo si de pronto llega la pérdida de alguno. Lo más lógico es ayudar a la persona ante la partida de su compañero.
Pero:
¿Qué pasa cuando el que se aleja es el humano?
¿Sienten ellos la partida de esa persona cercana?
¿Necesitan ayuda para superarlo?
La respuesta es un SÍ.
Esta situación también la vive el animal ante: la pérdida de otro perro/gato que era su compañero, la mudanza de un miembro de la familia, la separación conyugal o la partida “momentánea” por razones de estudio o trabajo.
Científicamente se comprobó que, a través de su gran olfato, los Perros tienen la capacidad de saber si estamos raros, si nos pasa algo. Es decir, de leer muy claramente nuestro comportamiento a través de las sustancias que secretamos.
Los animales, especialmente nuestros Perros y Gatos son seres sintientes, que tienen capacidad de sentir tanto dolor físico como emocional.
Seguramente muchos recuerden la famosa película “Siempre a tu lado” (basada en una historia real), donde un perro de raza akita, conocido como Hachikō, regresa todos los días a la estación del tren en la que vió por última vez partir a su humano, quien muere repentinamente en la universidad en la que dictaba clases. Como Hachikō no lo sabe, regresa todos los días a la misma hora a esperar al profesor.
Tras el fallecimiento de un familiar o de otro animal, es positivo permitirle estar presente, ver y olfatear; para que tenga verdadero conocimiento de lo que ha pasado.
Si el animal está muy deprimido tras la ausencia de su humano y presenta tristeza, angustia y estrés, va a afectar su parte física porque deja de comer, va a verse alterado su período de sueño, o no tiene energía, hay falta de interés, deambula por la casa en busca de su amigo perdido, presenta hiperapego, etc.. Es entonces necesario consultar y darle tratamiento. Aunque lo mejor es actuar de forma PREVENTIVA e implementar una TERAPIA de sostén para que el animal atraviese esta etapa sin sufrimiento.
También se deben seguir algunas PAUTAS como: procurar que él o ella conserve su rutina diaria. Que salga, haga ejercicio, que mantenga sus hábitos de alimentación y que comience a hacer algunas cosas nuevas y divertidas.
Aunque sí son muy reconfortantes las caricias y las palabras amables, quedarse encerrado en casa o consentirlo excesivamente puede empeorar la situación.
En lo posible, no trasmitirle tu pena con actitudes desmedidas, ya que ellos te observan y escuchan, angustiándose aún más.
Darle tiempo, paciencia y mucho amor son las claves para la recuperación de tan difícil momento.
En caso de ser necesario, utiliza Terapia Natural para el proceso de Duelo, como las flores de Bach que pueden administrarse fácilmente. Y armonizan la energía vital del individuo.
Salud para todos y Hasta la próxima!
Teresa A. Falsetti (Consultora floral - M.V.)